lunes, 17 de enero de 2011

Me gustó, y mucho, estar embarazada. 2010, un año para recordar.

Volviendo la vista atrás, solo tres semanas atrás, que es lo que hace que nació el niño, y ahi estaba yo con mi barriga.
Hace solo 3 semanas. ¿Ya hace tanto? Por un lado me parece muy poco tiempo, que pequeñito es el niño. Por otro lado me parece una eternidad. ¿Ya hace tres semanas?
Hace 3 semanas justas estaba en la clínica, recien parida, recosida y muy aturdida.

Si hecho la vista atrás recuerdo mi embarazo con mucho cariño. Me ha gustado enormemente estar embarazada. Sin duda porque he tenido un embarazo de auténtico lujo, aunque creo que aún si hubiera estado mal, también me hubiera gustado. Así que lo recuerdo con morriña. Me ha gustado mucho y sin duda volveria a repetir el embarazo, aunque claro, después del embarazo viene un lindo paquetito con todas sus consecuencias, con lo cual, no se si repetiremos, motivo por el cual recuerdo esos meses con más añoranza, e intento aprovechar al máximo todo lo que puedo de este bebé, no sea cosa que no repitamos. No me quiero perder nada, lo quiero aprovechar todo. Y eso traté de hacer durante el embarazo. No perderme nada y aprovechar cada momento.

Aunque también pienso que, cuando estaba embarazada, no sabia lo que me venía. Ahora que lo veo a cierta distancia, creo que al saber lo que hay, si hubiera otro embarazo lo disfrutaria aún más. Creo yo.

Así que para la que aquí llegue. Disfrutad a tope, porque es algo mágico, que no se puede describir. Algo único que ocurre pocas veces en la vida, normalmente. No todas somos como mi prima que tiene 7. Saboread cada minuto de vuestro embarazo. Vividlo al máximo.

Ayer hacía balance del 2010, y a nivel personal ha sido, sin duda, uno de los mejores años de mi vida. Me fuí con mi costillo de viaje a Francia. Fué un viaje muy breve y muy muy bueno. Visita a Lyon, Voiron y  Chamonix, de donde volvimos embarazados, con lo que si el viaje ya fué bueno de por si, al añadirle este regalito, el recuerdo es aún mejor. Disfruté durante este año de un embarazo maravilloso, en verano pude volver a celebrar mi cumpleaños por tierras ibicencas con mis tios, hemos podido hacer reformas en casa y la hemos dejado como nueva, o mejor, y el año terminó con la llegada de mi gordito. Podría haber salido mejor, pero ya sería pedir demasiado. Ha sido un año fabuloso, con lo cual, firmo para que el 2011 sea la mitad de bueno que el 2010.

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