Hace cosa de 3 semanas, habiendo recibido un generoso regalito en euretes, me fuí a una tienda de Palma a mirar hamaquitas para el niño. Me habían hablado muy bien de ellas, que iban muy bien, que incluso las usan en las escoletas, y decidí que compraría una con el dinero del regalo.
Estuve mirando el variadete de hamacas que tenían, unas sin balanceo, otras sin música, otras plegables, otras con de todo, y al final me decidí por la que me pareció mejor, que resultó ser la más cara (para variar). Pero para una vez que no andaba con restricción presupuestaria, decidí comprar la que más me gustaba, que fué esta de mamas&papas, que tiene el difícil nombre de Star-Lite Pudding and Pip (ya les vale), y que me costo la friolera de 150 eurazos.
Podría haberla pedido por internet, quizás hubiera ahorrado algo. Pero dado que la hamaca lleva un motorcillo que columpia al niño, pensé que si se rompía, tendría derecho a la pataleta en tienda, y de la otra forma no.
Razones por las que compré esta y no otras:
Que no fuera plegable. La verdad es que me daba igual que fuera plegable, porque tenía muy claro que no iba a andar paseando la hamaquita de un lado a otro, con lo que preferí comprar algo no plegable y más robusto. Así que en este caso me gustó mucho su robustez. Es muy resistente, aguanta al crio perfectamente y no se inmuta, ni con el balanceo de la hamaquita a toda pastilla.
Es preciosa. Para que engañarnos. Es la más bonita que había en la tienda.
La calidad de sus tejidos es excelente, muy agradable al tacto, y está muy bien hecha, muy bien acabada. Además la funda de la silla se puede meter en la lavadora (aunque no en la secadora), y se desenfunda muy bien.
Tiene luces en el ¿tejado?, por llamarlo de alguna forma, que al niño le gusta mirar, sobre todo cuando hay poca luz, que se ven más.
Tiene música, que la verdad, es bastante mala. Vienen un par de canciones a cual más fea, con lo que despues de un rato escuchando la misma cancion (porque no rotan solas, hay que cambiarlas), acaba una hasta los mismisimos bemoles. Peeero, tiene un conector para enchufarle un mp3 que es la leche, con lo cual, al niño le pongo la música que yo quiera.
Se mueve sola!. Yo creo que esto es lo mejor de todo. Tiene 5 niveles de meneo, para ir variando en función del peso del niño. No es que en el nivel 5 el columpio se menee tanto que el niño de vueltas de 360 grados, no. Y le debe gustar mucho al crio, porque se pega unas siestorras de la leche. Además, tiene un programador, para que el balanceo se apague en 5, 10 o 15 minutos, a elegir.
Tenia pinta de cómoda, y debe serlo, porque al niño le gusta mucho.
No tiene actividades como otras hamaquitas, pero dudé de su utilidad, y preferí que se balanceara sola o que fuera bien robusta. Su uso está limitado a bebes de hasta 9 kilos. Pense en comprar una que durase más tiempo, pero me dijo la chica de la tienda, que las hamacas cuando más se usaban era en esta franja de edad, desde muy bebés hasta 9 kilos, que cuando son más mayores, los niños no quieren ver la hamaca ni en pintura porque prefieren hacer otras cosas, así que seguí su consejo. Y por ponerle un pero, es que va a pilas. Podría ir enchufada a la corriente, para ahorrar las pilas, pero no. Asi que lleva unas pilas pequeñas en el tejado, y unas grandes y gordas en el lateral donde supongo está el motor que balancea la silla. Pero bueno, han pasado tres semanas aproximadamente, de uso diario, y aun aguantan las que pusimos.
Nada, que estoy contenta de haberme dejado los cuartos en esta pedazo de hamaca, porque la estamos usando diariamente, nos gusta mucho y al niño más.
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