Eso nos decía la matrona en las clases de preparación al parto, al ver lo requetepreocupadas que estabamos por el parto, y cuanta razón tenía.
En las clases no haciamos más que preguntar, preocupadas, por el parto y sus cosas, epidurales, episotomías, dolores, posturas, enemas, y demás cosas. Hasta que un día nos dijo la matrona: "Vosotras estais preocupadisimas por el parto, momento en el que vais a estar super vigiladas cuidadas y no os va a pasar nada, y de lo que deberíais preocuparos es de lo que viene después, que es bastante más duro"
Y era verdad. Recuerdo con mucho cariño la época de mi embarazo, cuando iba feliz a las clases pre parto, sin más preocupaciónes que las propias, que en aquel momento me parecian muchas, sin tener que cargar más que con mi barriga.
Ahora,
cuando para salir a la calle, ya somos yo, el niño, el carrito y toda su cacharrería,
cuando paso noches durmiendo cuatro horas, y no seguidas,
cuando se me cae la casa encima, cuando se me cae la oficina (que tengo en casa) también encima,
cuando creo que mi santo no ayuda lo suficiente, o que no hace todo lo que yo hago (tipico),
cuando estoy todo el día con la teta fuera y no puedo salir ni a comprarme ropa,
entonces
entonces recuerdo con mucho cariño mi vida de hace dos meses atrás.
Y si, la añoro. Aunque no lo cambiaría por nada, porque una sonrisa de tu hijo es mejor que todo lo anterior y compensa todos los días sin dormir que vengan. Pero eso no quita que recuerdes con nostalgia tu vida preparto, sobre todo cuando se te hace todo muy cuesta arriba como hoy.
Lo feliz que era yo con mi hermosa barriga, lo guapa que estaba, y la razón que tenía la matrona.
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