El otro día pillé en la televisión una entrevista que realizaba Punset a una investigadora americana, que trataba sobre las diferencias entre sexos, y lo determinante que es la biología en estos casos.
Lamenté y mucho no haber pillado antes dicho programa, pero con tal cantidad de telebasura en parrilla, muchas veces lleva un buen rato encontrar algo digno que ver. Eso cuando se encuentra.
La investigación en cuestión, y la entrevista, versaban sobre las diferencias de conducta entre niños y niñas, y cuanta parte de culpa de estas conductas tenian las razones biológicas y las ambientales.
Dado que en humanos erá muy dificil aislar estas conductas de tal manera que se supiera, a ciencia cierta, que un acto no estaba influido por factores culturales, decidieron hacer una prueba con monitos y monitas, dandoles para jugar cochecitos o chismes con ruedas, y muñecas.
Los resultados, sorpendentes, fueron que las monitas jugaban tanto con muñecas como con cochecitos, pero los monitos solo jugaban con cochecitos, sin hacer caso a las muñecas.
Es decir, sin haber en esté caso una influencia socio-cultural de por medio, las hembras aceptaban jugar con "juguetes tanto de niños" como de niñas, mientras que los machos solo aceptaban jugar con "juguetes de niños".
Asi que a parte de los condicionantes culturales y sociales, parece ser que la biología juega un papel determinante, y que nuestro pequeño Carlitos preferirá jugar con juguetes de machotes por un mandato biológico.
Otra cosa es que nosotros intentemos fomentar en el crio conductas más abiertas y enseñarle que hay conductas cosas a compartir, como seres "evolucionados" que se supone que somos, como las labores del hogar, por ejemplo.
Pero ya me puedo hacer a la idea de que la habitación se llenará de horrendos juguetes para niños, cochecitos, camiones, y demás muñecos horrorosos. Mira que son feos.
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